viernes, 20 de mayo de 2011

Entrevista a D. Juan Gálvez Elías

-          En primer lugar nos gustaría agradecerle el haber accedido a realizar esta entrevista que a buen seguro será de mucho interés para todos los visitantes de nuestro blog.

-          ¿Desde qué año participa usted como “Romano” en los desfiles procesionales de nuestra localidad?
Comencé a salir en el año 1949, cuando tenía tan solo 8 años. Desde aquél entonces hasta hoy, no he faltado ningún año a mi cita con mi Semana Santa. He tenido ocasiones en las que se me presentaban problemas y parecía que ese año no iba a salir pero al final conseguía estar montado a caballo, que era realmente lo que me gustaba, me gusta y lo llevo en la sangre, lo demuestra que hoy día a pesar de llevar más de 60 años, tengo la misma ilusión que si del primer día se tratase.

-          Muchas circunstancias habrán cambiado desde entonces, en la Semana  Santa en general  y más particularmente en los Romanos. ¿Podría esbozarnos cuales son estas, a su modo de ver?.
Desde luego que han cambiado muchas cosas, como la vida misma. La cualidad principal, es que te guste, que sientas esta celebración, y esta no ha cambiado. Como anécdota diré que al principio de salir yo, eran tiempos difíciles, era la posguerra, en esos tiempos se salía por necesidad para aprovechar para comer pestiños y magdalenas y llevar algunos a los hijos, la familia, se dice que nos rellenaban los leotardos con serrín y era verdad. Hoy día lo veo en general muy bien, aunque hecho de menos un mayor recogimiento, seriedad, más silencio y respeto por parte de cierto sector público.

-          De todos es sabido, que el participar en los desfiles procesionales montado a caballo se ha convertido en algo más que una tradición familiar. Cómo valora esta circunstancia.
Muy positivo, porque gracias a esta tradición, hoy contamos con una singularidad que no la hay en otros pueblos, nuestros romanos montados a caballo, y con la afición que hay actualmente a los caballos tengo plena confianza en que continuará por mucho tiempo.

-          A parte de su padre.., ¿tiene usted constancia de algún otro familiar suyo que haya participado anteriormente de Romano, sea a pié o a caballo?
Mi padre comenzó a  salir en el año 1920, por entonces el Capitán era “Cristóbal el de la Guasa”. Hasta el año 1927, no salió mi padre de Capitán y tuvo que echar una instancia que le duró 3 años. Salí yo en 1949 como ya he dicho, pero no fui Capitán hasta el año 1970 y no he perdido ningún año hasta el día de hoy. Mi hijo Juan Miguel salió 2 años a caballo y 3 andando y después salió mi hijo Pablo con sólo 4 años y hasta ahora es el que me sigue.

-          Sabemos que esta pregunta se la han hecho muchas veces, pero… ¿Qué se siente cuando va montado en su caballo, encabezando el “Paseillo” del Viernes Santo, escuchando los sones del  Centurión?
Para mí es algo que no se puede explicar, hay que vivirlo en lo alto del caballo. Con todas las personas que hay en los acerados tú no conoces a nadie, es que ni los ves, el romano va centrado en la responsabilidad tan grande que lleva, es un sentimiento muy especial, sobre todo cuando llegas a la Calle Corredera acompañado del Centurión.

-          ¿Ha salido usted de Romano en alguna otra de las Hermandades que procesionan Romanos?. Si es así, en cual y en que fechas.
No, la verdad es que la primera vez que salí a caballo, dudé y pensé hacerlo andando. Me hubiera gustado vivir y conocer la experiencia de romano a pié, pero escogí el otro camino con todo el trabajo que conlleva, que es mucho, pues al trabajo de los preparativos del romano a pié hay qua añadir el trabajo de preparar el caballo.

-          En Castro del Río hay mucha afición al caballo, ¿cree usted que esto puede contribuir positivamente a que el cambio generacional de la escuadra de caballo?.
Efectivamente, en Castro del Río hay una gran afición al caballo, hay mucho más que antes, de hecho, casi todos los Romanos tienen su propio caballo, entre otras cosas, porque es difícil que alguien te ofrezca el caballo. Yo nunca tuve problemas. Antes, los caballos venías de Praena, Monterrite, Doña Esteban, del  Rancho, etc, cuyos propietarios los cedían sin problema alguno, por su compromiso con la Semana Santa de su pueblo.

-          Nos alegra mucho verle en los distintos actos que venimos haciendo de un tiempo a aquí, peroles, cena, Ars Olea…  ¿Cómo valora usted el hecho de que se realicen estos actos que anteriormente no se hacían?.
Todo lo que sea fomentar y dar vida a nuestra semana santa y a las centurias romanas me parece muy bien, pues en estos encuentros se habla de lo que nos gusta, se aportan ideas, iniciativas para que esto, no solo no decaiga, sino que se potencie. Es bueno para todos. Hay que cuidar mucho nuestras tradiciones porque son nuestro tesoro y si además las enriquecemos con buenas propuestas aún mejor.

-          Como en entrevistas anteriores.., y como responsable de la escuadra de Romanos a Caballo, ¿Cómo se realiza en su escuadra la elección de jinetes?, ¿Cómo realizan el acceso de los candidatos a participar como Romano a caballo?.
Hay una lista con el nombre de las personas que comenta que le gustaría salir. Hay varios factores que son importantes, la antigüedad, la preparación como jinete, etc, para mi, salir de romano a caballo supone una responsabilidad grande, ya que en los desfiles hay mucha gente en la calle, los caballos se ponen nerviosos, por ello el que los jinetes tengan su propio caballo también influye ya que los conoce, formando un solo cuerpo. En resumida cuenta, el romano que deba salir, debe reunir las cualidades más específicas.

-          Hace poco, publicamos un extenso reportaje fotográfico sobre la Escuadra de Romanos a Caballo, espléndidamente realizado por nuestro amigo  Tatín. Muchas de las fotografías reflejan momentos que muy pocos conocemos, como la preparación de los caballos en una nave de la calle Ronda Vieja Salud. ¿Desde que usted tiene conocimiento siempre se ha realizado en dicho lugar, o antes, estos preparativos se realizaban en otro lugar?.
Sin duda un gran reportaje del amigo Tatín, cuando el llegó ya teníamos gran parte del trabajo hecho y él se sorprendió del trabajo que esto conllevaba. Hizo una gran labor al dar a conocer el laborioso trabajo de los preparativos antes de salir. Decir por otra parte que yo empecé a vestirme en los graneros de los hermanos Criado en la calle Córdoba, más tarde en la calle el Pozo en la casa de mis padres, después en el molino de la Bartola en el río y por último, en los graneros de D. Pedro Javier Criado el de Praena.

-          Teniendo en cuenta su extensa  experiencia como Romano, ¿nos podría contar algunas anécdotas o circunstancias que considere que sean dignos de mención?.
Hay muchas como te puedes imaginar a lo largo de tantos años. Recuerdo una sobre mi padre saliendo de Capitán, y fue que al terminar el paseíllo los romanos de a pié se sublevaron y le pidieron a mi padre que no salieran los caballos porque ellos querían un sueldo de 25 pesetas, y mi padre les contestó que no estaba de acuerdo ya que él no salía por dinero sino por devoción y en esa ocasión salieron solamente la escuadra romana a caballo.
Cuando yo estaba en Madrid haciendo el servicio militar, no me dieron permiso, y yo cogí el tren y me vine, cuando pasaron lista, yo no estaba, así que cuando llegué me quisieron meter en el calabozo.


-          Le gustaría añadir algo a lo ya escrito….
Desde aquí me gustaría homenajear a cada uno de los romanos con nombre y apellido que a lo largo de nuestra tradición semana  santera han salido en los desfiles procesionales enriqueciendo esos momentos de fervor y que estén orgullosos por haber formado parte, antes y ahora, de la historia y tradiciones de nuestro pueblo.
En los años 50 para salir había que pagar dinero, que se decía “la percha” , la ropa de los romanos a caballo que nos poníamos pertenecía a una banda de música que hubo mucho antes.
Los romanos que salían en los años 30 siendo mi padre el Capitán eran Juan Gálvez, Cristóbal de la “Guasa”, Juan Gil, Joaquín el Beato, Agundo, Nicolás el Crieto y Antonio Doncel .
Cuando mi padre empezó a salir sacó la jaca o el caballo que era blanco tirando a tordo, el dueño era D. Juan Luque que era abogado y estaba casado con una hermana de D. Andrés Criado según me contaba mi padre, y el albacea podía ser D. Paco Algaba.
A partir de los años 70 los Romanos eramos yo como Capitán ya, Rosindo, Ángel Peralta, Paco Barranco, Miguel Postura, Miguel Povedano, Hermano Navajas, Miguel Gómez, Andrés Águila y un hijo de Juan Doncel .
Los romanos actuales son, Juan Gálvez, Miguel Gómez, Pablo Gálvez, Paco Aguilera, José Antonio Doncel , Melchor, Luis Bello y Francisco Tamajón.

Reiterarle de nuevo, nuestro agradecimiento por su atención.
Romanos de Castro del Río 20 de mayo de 2011 d.c.

miércoles, 18 de mayo de 2011

Paseillo Santo Entierro - Viernes Santo 2011 d.c.











Los paraguas del fondo evidencian la presencia de la lluvia, a pesar de esta circunstancia y aprovechando un descanso de la misma, pudimos realizar el tradicional "paseillo".
Fotos Domingo Gómez

sábado, 14 de mayo de 2011

Madrugá 2011 d.c.





Aunque la lluvia ha impedido este año que las procesiones de la Vera Cruz, Madrugá y Santo Entierro, hayan podido desarrollar su estación de penitencia, los respectivos "paseillos" de los Romanos si han transcurrido con cierta normalidad. Las instantáneas que nos envía Domingo Gómez corresponden en este caso a los Romanos de la Madrugá, momentos previos al paseillo.
Fotos Domingo Gómez.